Levantó el paso para dar el otro, aunque por su mente en cuestión de micro segundos había pasado la idea de no llegar a darlo, como un rápido susurro donde él mismo escuchaba su voz diciéndose "¡detente!", mientras el peso del pie había llegado al punto de equilibrio, al siguiente micro segundo se dio cuenta que había tomado una decisión. A penas Pancho decidió sacar adelante su proyecto, por la cabeza danzaban los fantasmas como aquellos del célebre cuento del famoso escritor Charles Dickens , " los fantasmas de Scrooge ". Digamos, sólo para ilustrarles lo que pasaba allí adentro, que esta historia podría llamarse los tres fantasmas de Pancho. Entonces llegó el primero, el fantasma del pasado que lo atormentaba evocando recuerdos de momentos en los que no pudo sacar algo adelante, desde aquella vez, siendo aún niño, cuando intentó montar una patineta y al segundo intento cayó hacia atrás, no fue tan fuerte el golpe, pero sí la risa de los que lo acompa
Un poco de recuerdos en una olla, agregas mucha imaginación, dejas cocer por unos cuantos días, condimentos al gusto y remueves lo necesario hasta descubrir el nacimiento de algo nuevo.